El StelLab, entidad de investigación del Grupo, y FOCAL han desarrollado un sistema de sonido 9.1.2 y el software necesario para una inmersión sonora integral. El tratamiento digital aplicado a los sonidos simula el sistema auditivo humano. Las fuentes sonoras se crean de manera virtual y su localización se dinamiza para enriquecer la información que se transmite al conductor.
En el caso de un trayecto guiado por el navegador, la fuente de la síntesis vocal se localiza en el eje del vehículo, a cierta distancia. A medida que el vehículo avanza, la fuente se acerca al habitáculo desplazándose hacia el lado del cruce que hay que tomar a continuación. Al nivel de la intersección, el aviso sonoro se sitúa en el habitáculo, muy cerca del conductor para avisarle de la inminencia del cambio de dirección.
Además, la espacialidad permite adaptar el sonido a la morfología del vehículo y a su evolución. El sistema desarrollado por el StelLab configura así de manera autónoma las diferentes fuentes sonoras entre los modos cupé y descapotable del Fractal.
El Fractal explota asimismo la dimensión acústica atribuyendo una identidad sonora a su cadena de tracción eléctrica. En efecto, esta última está desprovista de las referencias habituales vinculadas a las motorizaciones térmicas. La Marca ha confiado esta tarea al diseñador sonoro brasileño Amon Tobin. La firma sonora exterior del Fractal le permite una armoniosa cohabitación con el resto de usuarios. Estos, especialmente peatones y ciclistas, reciben informaciones de la evolución del Fractal mediante sonidos que distinguen los diferentes estados: aceleración, deceleración o velocidad estabilizada.
En el habitáculo, la identidad de la Marca se revela a través de una concepción de audio inédita que sonoriza funciones como el contacto, los intermitentes, el warning, la iluminación o las diferentes indicaciones del navegador.