


Sólidamente puestos en la carrocería, las luces y los faros del Peugeot 2008 juegan con sus líneas felinas. Su diseño inédito está subrayado por luces diurnas de LED. Una firma afilada y singular para una iluminación de precisión.
Innovador desde la primera mirada, el Peugeot 2008 combina tres universos: elegancia de los códigos estéticos de la marca, robustez de un SUV moderno y compacidad de un vehículo urbano.
Sólidamente puestos en la carrocería, las luces y los faros del Peugeot 2008 juegan con sus líneas felinas. Su diseño inédito está subrayado por luces diurnas de LED. Una firma afilada y singular para una iluminación de precisión.
Con protección en bajos de carrocería y protecciones laterales en metal, el 2008 afirma su robustez.
Con su gran altura libre al suelo y los paseos de rueda realzados, garantiza una conducción segura en todo tipo de terrenos.
A la vez refinada y atlética, la silueta felina del Peugeot 2008 ha sabido conjugar una protección óptima y una línea elegante.
Esculpido en la materia al mínimo detalle, su diseño fuerte afirma un porte sofisticado e intenso.